Compañeros Salatin y Lepore: ¡Presentes!

MONTONEROS
JOSÉ SABINO NAVARRO

COMPAÑEROS
SALATIN Y LEPORE ¡PRESENTES!

Quien sabe, ya, qué destinatario tendría ese caño traicionero que estalló en Barrio Las Flores aquel caluroso 16 de Diciembre. .. seguramente, algún milico, que en alguna de esas, anda por ahí hablando de la "reconstrucción" o algún burócrata traidor, hoy ocupado en la "depuración ideológica".

Todavía no nos habíamos repuesto de lo del Matadero, donde perdimos a Olmedo, Baffi, Peressini, Villagra y Castilla, cuando la realidad nos volvió a sentar de culo. ¡Qué época fulera! la represión exigía guardar celosamente la clandestinidad; estaban a la orden del día los secuestros, torturas, asesinatos de militantes del pueblo. Pero eso sí, por lo menos el enemigo vestía uniforme y andaba en carriers, mucho peor es ahora que los que reprimen invocan a Perón, a la Argentina potencia, ocupan las jerarquías justicialistas y se conducen en los vehículos del Ministerio de Bienestar Social.

Sí, compañeros. Casi que duele más la muerte de Simona, de Razzetti o de Damiano que la del Gordo Mazza o de Belloni; por lo menos da más bronca...

Ustedes comprenden, compañeros... Por aquellos días, Martiarena era un ilustre desconocido, seguramente preocupado por pasar desapercibido hasta que aclare. Todavía Gelbard no hablaba de "reconstrucción"; estaba de moda el "Gran Acuerdo Nacional". .. Pero los hermanos de clase de Martiarena no estaban quietos. Tenían en Paladino un lúcido representante que negociaba el peronismo con mártires y todo con los milicos. Las veces que lo habremos oído putear a la "Mona" y al "Trosco" contra Paladino, que desautorizaba la guerrilla, negándole su carácter de peronista, cada vez que se le presentaba la oportunidad y para colmo usaba la misma jerga "antisubversiva" de Sánchez de Bustamante. Parece que no es nueva la práctica de los seudo-dirigentes de adjudicarse autoridad para otorgar la licencia de peronista... o para quitarla.

Costó mucha sangre traer al General a la Patria y reponerlo en la Rosada, muchos hermanos quedaron en la volteada sin conocer la suerte de la lucha por esos objetivos que veíamos como los más próximos en la larga marcha hacia el socialismo.

Por eso, cumpas, el mandato de nuestros mártires debe estar presente en la formulación de la estrategia y en la fijación de las tácticas de cualquier organización que aspire a un rol de vanguardia. No hay coyuntura que justifique transgredir ese mandato; el carácter no negociable de la sangre derramada es mucho más vigoroso que cualquier maniobra táctica.

De allí que no podemos ocultar que el Pacto Social, la Ley de Asociaciones Profesionales, el ministro Otero, el Consejo Superior... no complacen las aspiraciones del pueblo trabajador que puso las provincias en pie de guerra contra la tiranía militar y que desbordó cuantas veces fue preciso a las direcciones claudicantes y que tampoco tiene nada que ver con la vida y la muerte de los combatientes que cayeron peleando por las aspiraciones populares.

Sería más fácil apelar al manual de justificaciones rebuscadas para conservar la coherencia de consignas como "unidad nacional", en lugar de decir que la burocracia está llevando a cabo el proyecto de "reconstrucción capitalista", el mismo que animó en estos 18 años de lucha alas cúpulas justicialista y que inspiró a Lanusse y Mor Roig para alumbrar el Gran Acuerdo. Pero no podemos. Por ustedes cumpas y por la conciencia de la clase obrera y el pueblo peronista.

Por ustedes y por la fidelidad a esa clase trabajadora y a ese pueblo peronista debemos decir sí, que no puede haber liberación en la patria con el mismo ejercito que tiene las manos manchadas con la sangre de Trelew, con el mismo ejército del que se burló el pueblo el 26 de mayo, ni con los dirigentes de la nada que hasta el 11 de Marzo fueron socios de ese ejército en la triste faena de subastar el país y entregar a su pueblo.

Por ustedes y por la fidelidad a esa clase trabajadora y a ese pueblo peronista es que debemos afirmar que no claudicaremos en nuestra lucha frontal contra la burocracia "peronista"; que redoblaremos los esfuerzos para contribuir a la organización del peronismo de las bases, del peronismo de abajo, del peronismo descamisado y montonero, única garantía de proseguir el camino revolucionario que representa el Peronismo, única manera de impedir el final inglorioso que los traficantes y traidores le desean para salvar este sistema.

Las banderas de estos 18 años de lucha siguen pendientes, su cristalización costará todavía muchas vidas, pero estamos Seguros que no faltarán brazos para empuñar los fusiles, como no faltaron los que recogieron las banderas de los compañeros que hoy recordamos.

Sí, cumpas. Los estamos escuchando. Para conquistar el poder para los trabajadores debemos aplastar a la burocracia, ésa es la consigna. Llevar el nombre de Evita, sin concesiones, como bandera a la victoria, en la construcción de la Patria Justa, libre y soberana, la patria socialista.

Porque creemos Incondicionalmente en la base peronista, la que hace andar las fábricas, las que habita las villas y los barrios, la que trabaja en la tierra que no le pertenece; porque creemos en nuestra propia fuerza que es la fuerza de la clase obrera y el pueblo peronista; porque sabemos que la revolución está presente en la conciencia popular; porque la sangre derramada no será negociada nos atrevemos a repetir una profecía sin necesidad de bola de cristal: LA RAZA DE LOS OLIGARCAS EXPLOTADORES DEL HOMBRE MORIRÁ SIN DUDA, EN ESTE SIGLO.

COMPAÑEROS SALATIN Y LEPORE:
¡HASTA LA VICTORIA SIEMPRE!

"LA PAZ PERONISTA ES HACER LO QUE EL PUEBLO QUIERA" (Evita)

PERÓN O MUERTE
VIVA LA PATRIA

MONTONEROS JOSÉ SABINO NAVARRO
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FUENTE: Militancia Peronista para la Liberación, Nº 27