Uribe: Con el sol a las espaldas. Declaración del III Pleno del Comité Central

URIBE: CON EL SOL A LAS ESPALDAS

Declaración del III Pleno del Comité Central

Enero de 2009

El gobierno de Álvaro Uribe Vélez ha entrado en una situación de deterioro político irreversible, aunque recurra a cortinas de humo y maniobras de todo tipo para ocultarla. La gobernabilidad de Uribe y su reelección (tanto en 2010 como en 2014) hoy son más esquivas. Esta realidad da moral a las fuerzas de oposición al régimen y posibilita nuevas victorias populares cuando la compleja situación del país exige acción política atacando problemas estructurales agudizados por las crisis económica, política, humanitaria, ambiental y alimentaria que están lejos de ver el final del túnel.

Las masas populares se hicieron sentir con fuerza en el último trimestre de 2008 ubicando como blanco principal de la acción política al gobierno. Con distinto nivel de tenacidad, propósitos y objetivos lograron generar fisuras al interior del bloque político y de clase que gobierna.

Desde el cese laboral en la justicia hasta los paros cívicos que sacudieron los departamentos del sur, pasando por la gran huelga obrera de unos 22 mil corteros de caña, las peleas de los camioneros, las iniciativas de los viviendistas; las marchas de los estudiantes, los maestros y los pensionados y las protestas de los portuarios; las acciones del movimiento de víctimas de crímenes de Estado y la gran movilización indígena-campesina-obrera al calor del “Minga Indígena”, todas ellas, obligaron al Presidente a bajar su arrogancia y entrar en diálogo directo con líderes populares, a no limitarse a la represión que dejó asesinatos y otros crímenes propios del terrorismo de Estado.

Uribe va perdiendo base social en la capa media urbana por sus medidas económicas de choque para sortear la crisis y el autoritarismo; al paso, afianza los odios y rechazos –que no eran pocos- de los obreros y asalariados más explotados y del campesinado pobre y medio. Además, está exacerbando las diferencias económicas y políticas al seno de su clase, de la burguesía.

Esto favorece el trabajo entre el pueblo de quienes privilegiamos la lucha directa de masas, de quienes no leemos la realidad sólo y predominantemente desde el cálculo electoral y parlamentario. Ahora, toma más relieve táctico-estratégico la consigna ¡fuera Uribe y gobierno de amplia convergencia democrática!

El quiebre político uribista llega cuando las convocatorias “anti-Farc” y “anti-secuestro”, de principios del 2008, se calificaron como la apoteosis del proyecto fascista de “Estado Comunitario”, y como supuesta demostración de estar ante un Uribe invencible.

Las batallas políticas y sociales también debilitaron la tesis del “postconflicto”, y a pesar de los reveses militares de las FARC y del golpe político al ELN por su errónea táctica de “diálogo y negociación”, el movimiento armado –y nuestro EPL como parte del mismo- aporta mucho a romper la reaccionaria “seguridad democrática” fortaleciendo la lucha política en función del poder.

El 2008 dejó, como hecho histórico, el fallo de la Corte Suprema de Justicia sobre la “yidispolítica” (pisoteado por la Corte Constitucional) que declara ilegal e ilegítima la reelección de Uribe, Presidente cuya relación con criminales salta a la vista con la estela de impunidad de la “ley de justicia y paz” en cuyas arenas movedizas se ha entrampado al verse acosado por confesiones de los capos narcoparamilitares que extraditó. Como si fuera poco, el escándalo de la ‘parapolítica’ no cesa y complica mucho el trámite de la reaccionaria agenda legislativa, más en particular, el camino que recorrió y le falta al referendo reeleccionista y a la reforma política. Uribe también hizo el ridículo parlamentario con el retiro de la reforma a la justicia por física ineficacia y falta de calidad.

Así Álvaro Uribe haga malabares y trate de salir airoso, sacar del ejército a cinco generales de diferentes divisiones por los asesinatos llamados “falsos positivos” confirma los crímenes de Estado, ratificados con nuevas condenas al Estado por la Corte Interamericana de Derechos Humanos.

Otro duro golpe sufre Uribe al descubrirse la simulación de combate a la corrupción en dos períodos presidenciales, decenas de oficiales de policía resultaron ‘narcos’ y altos funcionarios exigen cuantiosísimas sumas para asignar canales de televisión y licitaciones de grandes obras públicas.

El 2008 en el plano internacional fue muy desafortunado para el gobierno, se le vino la crisis económica encima mientras pregonaba el “blindaje del país” y su postura dócil ante el imperialismo y los monopolios no le permiten lanzar iniciativas anticrisis como el no pago de la deuda externa, o de estatizaciones para proteger expectativas colectivas como el derecho a las pensiones.

Mientras se presenta la fiera resistencia del pueblo palestino ante la agresión sionista-imperialista y cuando las luchas populares en Ecuador y Bolivia no ceden ante los imperialistas yanquis y su lacayos, justo cuando se daba el levantamiento popular en Grecia y las huelgas en Europa, Uribe afrontaba la desarticulación de su eje internacional con la pérdida de los republicanos en EUA. Bush premió su sumisión con la afrenta a Colombia otorgándole la “medalla de la libertad”; pero Uribe, peón de brega de Bush, no logró quitarles prestigio continental a los gobiernos con ideas alternativas progresistas, democráticas y antiimperialistas que enfrentan –así sea parcialmente- al modelo de dominación imperante, al servicio de los imperialistas y las oligarquías genuflexas.

Es notable el progreso de la lucha antifascista y antiimperialista de los pueblos, que debe asumirse sin triunfalismos que lleven a proponer objetivos superiores a las fuerzas y a subvalorar a un enemigo que no dudará en reprimir con el terrorismo de Estado, que no da lugar a bajar la guardia.

Barack Obama se ha rodeado de “halcones”, ratificó al genocida secretario de defensa (guerra) de Bush, apoya las acciones de los criminales sionistas contra el pueblo palestino y no investigará “nada del pasado” de Bush, el cierre de Guantánamo no significa liberar más de 250 presos injustamente detenidos desde hace unos siete años, posturas y poses que lanzan un baldado de agua fría a quienes tienen expectativas sobre el supuesto progresismo de su gobierno. Obama confirma el peligro de guerra y el recurso al fascismo contra la inconformidad popular.

La acumulación revolucionaria se expresa de diferentes formas en nuestra América Latina y el Caribe. Estamos por fortalecer la tendencia de izquierda que está en desarrollo, muy animados por los avances de 50 años de la Revolución Cubana, por los logros del pueblo ecuatoriano y a pesar de las dificultades y peligros que arrostra la lucha popular y revolucionaria en Venezuela y Bolivia.

Urge unir esfuerzos y análisis con todo el movimiento revolucionario, antiimperialista, antifascista y democrático para hacer frente la situación política generada por la crisis económica y sacar el máximo resultado de este momento favorable para el desarrollo de las fuerzas del cambio.

Llamamos a afianzar la ligazón entre la acción social y política con la lucha por la solución al conflicto político, social y armado que vive Colombia, por la paz con justicia social y por el canje humanitario, atándolas a la oposición a Uribe como responsable de la guerra reaccionaria.

Nuestro Partido seguirá aportando a la unidad de acción obrero-popular en las distintas formas de organización y de lucha, para avanzar en la coordinación y centralización de las acciones que aún no cuentan con un centro de dirección, que solo han construido algunos espacios de coordinación que están en construcción y tienen muchas limitaciones.

“Los que mueren por la vida no pueden llamarse muertos y a partir de este momento es prohibido llorarlos…” Camarada ASDRUBAL JIMENEZ… ¡Presente!

Comité Central
Partido Comunista de Colombia (marxista-leninista)