Manifiesto frente al proceso electoral

“AÑO DEL CENTENARIO DEL NATALICIO DE JOSÉ MARÍA ARGUEDAS”

MANIFIESTO

Al pueblo peruano.
A los dirigentes populares y compañeros de izquierda.
A los luchadores sociales y militantes tupacamaristas.
A la comunidad internacional.

Saludamos a los peruanos y peruanas, que enfrentan la grave crisis de un modelo económico caracterizado por la corrupción que crece día a día, una constante alza de los alimentos y combustibles; y, una especulación desenfrenada con el argumento del “libre mercado y la salvación de la inversión privada”; que trae como consecuencia la marginación, el empobrecimiento y la injusticia social, donde carecemos de empleo digno, falta de elevar la calidad de vida y la ausencia de políticas de desarrollo que favorezcan a las grandes mayorías.

Son 20 años de neoliberalismo, privatización y concesión; 5 años de TLC, y cada gobierno entrante ratifica el modelo económico a través de los llamados “acuerdos nacionales” haciendo oídos sordos al pedido de cambio de la población. Y frente a los que se levantan para rechazar medidas y leyes entreguistas, empieza la cárcel y la persecución. Así podemos notar, cerca de los 100 peruanos muertos y la detención de los dirigentes mineros, amazónicos, campesinos y pobladores, sucedido en el segundo gobierno de Alan García. Es hora de detener el abuso en el ejercicio del poder y la búsqueda de impunidad como política del Estado. Estas tres últimas elecciones presidenciales, con segunda vuelta, se polarizaron las propuestas políticas, unos en defensa del empleo y la soberanía; y otros, en defensa de la inversión extranjera monopólica.

Los candidatos que crecieron, fue con un discurso abiertamente cuestionador a las políticas de shock, rechazo al TLC y un compromiso por el cambio de la constitución política. Sin embargo, luego de ganar han hecho todo lo contrario. Esto nos enseña que este proceso electoral no solucionará la crisis económica, política y social, menos el gobierno entrante elegido; por el contrario, la historia nos ha demostrado que este medio finalmente absorbe y alinea a cualquier política que pretende llegar y desde allí cambiar los estamentos del Estado.

En estas elecciones del 2011, observamos que no hay candidatos que asuman un rechazo abierto al modelo y al sistema que, privilegia exclusivamente la inversión privada, donde la distribución de la riqueza social se da entre los monopolios y los gobiernos serviles. Hoy toda la derecha se alinea en defensa del modelo y la constitución política heredada de la dictadura, y se alarman ante el sentir del pueblo que pide un cambio en el rumbo económico; se aferran a mantenerse en el gobierno y en el continuismo, para seguir administrando el poder de los monopolios y el imperialismo, no escatiman las alianzas, los fraudes y la amenaza contra una fuerza de oposición y contra los luchadores sociales. Mientras tanto, campea la corrupción, la mafia, el remate y la entrega de nuestros recursos; por citar podemos señalar, los costos de la carretera interoceánica, presupuestado a 850 millones de dólares - y ahora último – el presupuesto pasó a 1890 millones de dólares, sin tener estudio de impacto ambiental.

El pueblo está por la unidad, pero esta se dificulta por las componendas de dirigentes que ya han dejado de ser de izquierda. Además, se empieza a captar que, el llamado crecimiento económico no es desarrollo económico, y que los beneficios son solo para los inversionistas y las autoridades corruptas que viven de eso. El pueblo está por el camino del cambio, pero las actuales fuerzas de la izquierda legal o de oposición siguen conviviendo con el modelo; para nosotros, el camino del cambio es el camino de la insurgencia popular y la revolución. Por eso llamamos a impulsar un movimiento de masas independiente a los gobiernos entrantes y a los “acuerdos nacionales” que reafirman el continuismo neoliberal. Llamamos a los trabajadores para que formen sindicatos o se afilien donde los haya, fortalezcan la organización popular y social.

Llamamos a los hombres del campo para centralizar los esfuerzos en la defensa de la tierra y el ambiente. Llamamos a los pueblos, dirigentes locales y regionales a defender nuestros recursos. Llamamos a la juventud para impulsar la organización y elevar la conciencia del pueblo. Llamamos a las bases de izquierda y el nacionalismo a forjar un nuevo liderazgo en defensa de la soberanía, el trabajo y la transformación que el pueblo reclama. Llamamos a los miembros de las fuerzas policiales y militares a no disparar contra el pueblo y a defender la patria. Necesitamos articular todas las fuerzas sociales y políticas contra el sistema.

No negamos ninguna forma de lucha de nuestro pueblo, sin embargo, consideramos que estas deben servir para la acumulación con el sólo objetivo de llegar al poder. Hoy, donde la voracidad capitalista colapsa poniendo en juego la extinción de la especie, afirmamos el camino de la revolución y el socialismo.

¡Con las masas y las armas, Patria o Muerte… Venceremos!
¡Dignos y rebeldes!

Perú, Abril del 2011
Dirección Nacional del MRTA
Paco Sifuentes.